lunes, 22 de septiembre de 2008

Divagaciones de media noche

Palabras. Letras, una tras otra, con significados distintos en tanto que se relacionan entre sí. No es lo mismo m que a que r que i que n que ma que ria que na que maria que ana que riana que Mariana. No es la misma María mi prima que María mi hermana que María tu amiga que María la mamá de Carla que María el personaje de aquella película, que a su vez no es la misma ni son que Ana mi amiga o Ana mi sobrina o Ana tu profesora o Mariana yo, Mariana la compañera de Raúl, Mariana la hermanita de Made, Mariana la isla o Mariana la tocaya de la esquina. Las palabras son, pues, una etiqueta para identificar, para relacionar, porque de eso depende todo eso que llamamos “raciocinio”, de las relaciones que hacemos.

Un sistema. Las palabras son un sistema. Un sistema sinérgico, además. Buenas palabras, cuatro palabras, medias palabras, palabras claves, palabras de honor, palabras de matrimonio, palabras de rey, palabras gruesas, palabras mágicas, palabras ociosas, palabras pesadas, palabras picantes, palabras preñadas, palabras al aire, palabras cruzadas, palabras de buena crianza, palabras de la ley, palabras de duelo, palabras de oráculo, palabras de presente, palabras libres, palabras mayores, santas palabras, palabras ahorradas, palabras en la boca, palabras gastadas, la última palabra, todo tipo de palabras. Y podemos hacer tanto con ellas, además. Podemos alzar la palabra, hablar a media palabra, atravesar una palabra, estar bajo palabra, beber palabras, tomar la palabra, comer palabras, correr la palabra, dar la palabra, ser de pocas palabras, dirigir la palabra, faltar la palabra, mantener la palabra, medir por las palabras, no decir palabras, pasar la palabra, quitar la palabra, remojar la palabra, soltar la palabra, tener la palabra, torcer las palabras, tratar mal de palabra, trocar la palabra, vender palabras.

Entonces, de un modo un tanto abstracto, yo, Mariana, esa Mariana que soy yo y que no es nadie más, que soy para mí porque me conozco, porque me percibo diferenciándome del todo y de sus partes no sólo por lo que soy sino por lo que no soy; esa, sin esa palabra, sin ese nombre que para mí es mío y que para ustedes soy yo, pero que en ojos de morfología es sustantivo propio, en los de la sintaxis sujeto o complemento directo o quizás hasta indirecto, en los de un italiano un error por ausencia de una n, y así infinidad de perspectivas; sin esa palabra, acompañada además de un apellido que me diferencia aún más de las tocayas hermanas, compañeras y vecinas de la esquina, ¿sería del todo yo?

Estoy. De que estoy aquí estoy. Lo veo yo, lo siento yo, soberbiamente podría decir que lo yo, porque estoy conciente de mi existencia, porque me percibo, porque me concibo. Y además no sólo estoy, sino que también soy. Pero al ser, soy para, soy de, soy con. Todo ello implica relación a. Entonces, ¿“Mariana” es mi primera y más directa relación con el mundo y la realidad que existe fuera de mí? La realidad en donde estás tú y está él y están ellos y estamos todos y a la vez no estamos y a la vez somos y no somos.

Palabras, palabras, palabras. Al final supongo que, para los demás, antes que nada no somos más que palabras en su léxico.

4 comentarios:

Miss Alice dijo...

Mari, you are you. No necesitas las relaciones con los otros para ser lo que eres. Para ser de, ser para, ser con... es necesario SER. Ser de uno, para uno y con uno mismo. Said Juliet of her Romeo:

"What's in a name? that which we call a rose
By any other name would smell as sweet;
So Romeo would, were he not Romeo call'd,
Retain that dear perfection which he owes"

So Mari would, were she not Mari called, retain her escence, which we love.

E. Rigby dijo...

Jajaja estamos de acuerdo, pero a lo que me refería era:

Yo, soy yo. No tengo duda de qué soy, quién soy, cómo soy, a pesar de que uno cambie tales o cuales cosas. Pero para ti, para él, para ella, para ellos... ¿soy yo la que soy para mí, conmigo, de mí?

No one gets us 100%. So my call is "no". Not entirely anyways.

Unknown dijo...

Esta MARIANA la COMPAÑERA DE RAUL Y NO ESTA "ANA" TU PRIMA??? Que ganas!

E. Rigby dijo...

Porque ya había usado la palabra "prima" my dear! Y tú no eres "Ana", tú eres "Ana Sofia"... viene junto wether you like it or not!